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jueves, 20 de diciembre de 2012

Mi encuentro con Israel Ana María (García) Alvarado




Comienzo de mi viaje a Israel; un sueño a punto de realizarse.  Sentada en el aeropuerto de Miami, FL en espera del avión que me trasladará a Roma vía Alitalia. Hoy es viernes, 9 de noviembre de 2012.  (foto 1)
Mañana tomaré otro avión que desde Roma me llevará a Tel Aviv, Israel. Después de una larga espera, al fin salimos con destino a Israel. Ya es sábado, 10 de noviembre, 2012.
Hay vivencias que dejan huellas profundas y luego, cuando se quieren expresar, las palabras no fluyen porque las experiencias se han convertido en sentimientos y esos no reconocen vocablos humanos. Ese ha sido el caso de mi encuentro con Israel, la tierra santa.
Y Jehová poseerá a Judá su heredad en la tierra santa, y escogerá aún a Jerusalén. (Zacarías 2:12)
Impactante la llegada. Las pistas del aeropuerto vacías, todo es silencio y hay mucha calma. Dentro de limpísimo aeropuerto seguía la calma y el silencio se percibía. Apenas se veían personas en él. Era Sabbath y la gran mayoría del pueblo judío guarda el día de reposo. Es hermoso ver la Biblia tomar vida ante los propios ojos. En la Torah está la ley de D—s y ésa se debe guardar. Así lo dispuso Adonai a través de Su siervo Moisés, muchos, muchos años atrás. Pero, la ley debe cumplirse porque a este pueblo le falta la dimensión mesiánica cumplida en Cristo Jesús, Salvador de quien le busque. Hermosa quietud con una profunda tristeza.
A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. (Juan 1:11)
Impresionante llegar a Israel a través del Aeropuerto David Ben Gurión. Ante todo, porque estimo que nada más lógico que nombrar el lugar de entrada a la nación honrando a un gran estratega, a un genio militar que en solamente 6 días puedo expander el territorio de la naciente nación con tierras que le pertenecían. Además de buen patriota y buen judío, fue el primer Primer Ministro de Israel una vez constituida en nación libre y democrática el 14 de mayo de 1948, día de júbilo y gloria para un pueblo errante. Los judíos no tuvieron tierra que llamar su nación por 2,000 años. Fueron esparcidos por el mundo según había hablado Jehová.
Y a vosotros esparciré entre las naciones, […] y vuestra tierra estará asolada, y desiertas vuestras ciudades. (Levítico 26:33)
(foto 2)
La comodidad, la amplitud de los pasillos. Todo el consabido papeleo fue resuelto con gran rapidez y pericia. Se mete por los poros la amabilidad en medio de una extrema seguridad, quizá la mayor en el mundo. En Israel no hay miedo a pesar de estar rodeada de mar y enemigos, y esa seguridad me sobrecogió desde que llegué a Israel. No hay temores a pesar de los múltiples ataques constantes. Hay conciencia de pertenencia y cada quien se desliza a su diario vivir sin que nada externo le afecte. Por eso el país se mantiene en constante movimiento y lleno de vida. No se amedrenta por nada ni nada conturba la tranquilidad. Israel parece vivir y dormir en paz.
Ya el equipaje nos espera en el carrusel y nuestro autobús, que sería nuestro hogar por varios días, nos espera todo dispuesto. Tomó media hora llegar al Hotel Marina en la ribera del Mar Grande en términos bíblicos y hoy conocido como Mediterráneo. Esas aguas arrullarían el sueño de la primera noche en Israel. Agradable el hotel y muy buena acogida.
El sueño de toda una vida ahora se iba convirtiendo en realidad y fue cuando mis pies tocaron suelo en Israel.
Mi primer medio día en Tel Aviv, cansada por el larguísimo viaje, fue una experiencia maravillosa. Mucho más de lo que esperaba porque Israel sorprende al visitante. Esperé con calma que me subieran la maleta para darme un buen baño, irme a comer, ¿qué me servirán? Luego salí con una recién estrenada amiga, Magnolia (Silva) Rengifo, a caminar y dejar que la brisa fría de la noche acariciara mi rostro y qué delicia resultó. Quise bañarme en las aguas frías del Mediterráneo, pero la noche oscura y la falta de compañía para hacerlo me impidieron darme el gusto. Al menos toqué las aguas que ya había tocado en otros de mis saltos de trotamundos. (foto 3)
Después de una noche de merecido descanso, el domingo 12 de noviembre, 2012, salimos a recorrer la ciudad de Tel Aviv, impresionante. Es el cerebro mercantil de la nación. Allí se mueve la bolsa y las grandes empresas. Es una ciudad de negocios y de inversiones. Comparada con el resto de Israel, es una ciudad moderna y esa modernidad se deja ver muy bien en edificios fascinantes, algunos copias de Dubai, pero superada la arquitectura. A pesar de lo moderno, hay sabor antiguo en algunas de sus calles alejadas del bullicioso de lo moderno. (foto 4 )
Paseamos Tel Aviv y pudimos apreciar su importancia, pero lo nuestro eran las tierras bíblicas, las tierras donde Jesús caminó. Así fue como después de una noche reposada y de descanso, volvimos a nuestro hogar sobre ruedas para seguir explorando y adentrarnos en nuestro peregrinaje por la tierra santa.
Israel, en tamaño, tiene 7,000 Km. en dimensión y 8 millones de habitantes. Jerusalén tiene 700,000 habitantes. Su longitud es aproximadamente de 500 Km. Y en su parte más ancha es de 114 Km. El 75% de la población es judía. Del 25% restante, el 90% es musulmán y hay un 2% de cristianos. El 70% de su suelo es desértico, pero sus habitantes orgullosos, dicen que todo en Israel es tierra fértil y de una forma u otra, es verdad. Usa energía térmica. Hay un sistema de goteo porque toda planta necesita agua, de otra manera no habría vegetación. En todos los jardines se aprecia un sistema de tubitos que se conectan y por donde salen las gotas de agua para el regadío. En Israel llueve muy poco. Su capital es Jerusalén. Algunos judíos chistosamente dicen que Tel Aviv es la ciudad de la minifalda por aquello de que el nombre puede decirse fluidamente y resultar ser, “te la vi”. Vaya chiste, pero de algo hay que reírse.
Jope es la parte antigua en la que nos fuimos adentrando; cuenta con 4,000 años de vida. Si sus calles pudieran hablar cuántas historias nos contarían; pero las piedras no hablan a menos que el cristiano calle el amor de Yehoshua.
Os digo que si éstos callaran, las piedras clamarían. (Lucas 19:40b)
Nuestro excelente guía, Alfredo Levín, judío argentino repatriado en Israel desde hace varios años, con mucho entusiasmo y una admiración increíble por sus raíces judías, nos habló de Pesah y de Sukot, la fiesta de la pascua y la de los tabernáculos donde siempre hay 4 cosas. Mientras él hablaba de todo esto yo pensaba, porque en Israel es muy importante el raciocinio, hay que pensar para entender, les falta la dimensión de la Trinidad que completaría el famoso tetragrámaton, que cumple la perfección con el nombre de D--s que en hebreo contiene cuatro letras y la plenitud de la deidad que es la Trinidad, Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo.
Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo y el Espíritu Santo; y estos tres son uno. (1ª Juan 5:7)
Entre todo el trasiego vivido, la mente observa y se preocupa e incluye curiosidades cotidianas como ver que el semáforo funciona distinto en Israel, va de rojo a ámbar y luego a verde. ¿Por qué mi mente registró este detalle tan ajeno a la intención con que quise ir a Israel?
Pero, tomemos el hilo de nuestra narración. Me temo, sin embargo, que esos lapsos volverán a suceder dentro de mis notas. En fin, alrededor de Israel hay 200 millones de árabes. Sus vecinos son Jordania, Siria y el Líbano al norte. A su oeste tienen a Irak y a Irán y por el este a Egipto, Argelia y Libia y por el sur la Arabia Saudita, pero Israel en el medio, es el centro del mundo. Todavía andan por ahí ciudades como Ashkelon y Ashdod, antiguas ciudades filisteas y la región de Samaría (con acento como lo pronuncian allá), que es la región de Sharon (Sarón).
Yo soy la rosa de Sarón, y el lirio de los valles. (Cantares 2:1)
A veces los sucesos no estarán contados en el orden en que sucedieron, pero como todo viaje de exploración y encuentros y regido al horario que mejor funcione, hay saltos en el tiempo, pero no en la veracidad de los hechos. Hecha esta salvedad, comenzamos con nuestro recuento de lo vivido y experimentado.
Llegamos a las ruinas de Cesárea Marítima donde caminamos por el antiguo teatro romano y por lo que queda de aquella ciudad majestuosa, capital de la provincia de Palestina. Se construyó en el año 22 a. de C. Herodes la llamó elegante y ahí estaba el templo dedicado a Augusto César. Fue el centro de educación y cultura de la época. Herodes fue un megalómano con delirios de grandeza y construyó palacios y también fortalezas como medio de salvaguardarse. Fue el período de la dinastía romana. Después de  Cristo se vio el colapso del imperio romano y lo conquistó  el imperio bizantino. El cristianismo fue la religión del estado. Fue cuando se dedicaron muchas iglesias. Israel es una zona sísmica y muchos terremotos han azotado a varias áreas. Cesárea Marítima fue destruida totalmente. En el siglo VII, sin embargo, la conquistaron los musulmanes. Luego vino la época de la Cruzadas en el siglo XII cuando se reconstruyó la ciudad. En 1265 los musulmanes la volvieron a atacar y el Sultán Baybars la destruyó completamente. Con la ayuda de Benjamín de Rotschland Cesárea se vuelve a construir y es hoy una bella ciudad israelita.
El anfiteatro romano, cerca del agua, como todos en la antigüedad, claro, por eso anfi que significa agua, se usaba en los meses de verano y tenía capacidad para 3,000 personas. El área para espectáculos es todavía impresionante. A los costados tenía salitas que llamaban “vomitorios” porque venían comidos, pero también muy bebidos. La acústica es formidable. En forma de semicírculo, el aire apoya la voz contra el lugar del público y se pude oír perfectamente desde cualquier parte. Todo el centro lo componía la escenografía. (foto 5)
Cesárea es una ciudad de 100,000 habitantes y tenía sus cuadrigas (romanas) que la tiraban cuatro caballos. Era un puerto de mar muy importante. Pedro salió de Jope y fue a Cesárea a ver a Cornelio en su trabajo de evangelismo.
Había en Cesárea un hombre llamado Cornelio […] piadoso y temeroso de Dios […] y oraba a Dios siempre. […] (Hechos 10:1-48)
Otro de los buenos (¿?) chistes judíos. Pedro negó a Cristo tres veces porque le sanó a la suegra.
Bueno, después del pequeño refrigerio, sigamos adelante. Pablo fue discípulo de Gamaliel quien a su vez fue discípulo del Rabí Hidel que abogaba que el camino hacia D--s era a través del hombre y había que entender su postura. Por otro lado estaba el Rabí Shamai que decía que la Torah había que leerla en la casa de D--s. Eran opositores y Shamai decía que todo había de cumplirse mientras que el otro decía que D—s lo usaba para ayudar al prójimo, lado humano. Quepa aquí este apóstrofe para hablar de Pablo dentro de un momento. Cesárea fue la prisión de Pablo, pero se le permitía tener contacto con sus colaboradores.
Al oro día saliendo Pablo  y los que con él estábamos, fuimos a Cesárea; […] (Hechos 21:8)
Pero Festo respondió que Pablo estaba custodiado en Cesárea […] (Hechos 25:4)
Cesárea era importante porque la inventaron los judíos, bueno…
Yerushalayim solamente es importante para los judíos, tiene realce porque mantiene el cristianismo en la época bizantina. Cesárea por otro lado, representa el paganismo.
Tiberius Pontius Pilatus vivió en Cesárea. Allí se encontró una piedra con su nombre. La que ahora hay no es la original. Vivir en Cesárea era como vivir en Roma. Este Pilatos no supo qué hacer con Jesús; tenía que hacer lo que quería el pueblo. Los judíos llevaron a Jesús a la Fortaleza Antonia en Jerusalén donde estaba Pilatos. Él era el gobernador de Jerusalén (Judea) desde Cesárea.
Viendo Pilato que nada adelantaba, sino que se hacía más alboroto, tomó agua y se lavó las manos delante del pueblo, diciendo: Inocente soy yo de la sangre de este justo; […] (Mateo 27:24) (Acontecimiento ocurrido en Jerusalén.)
En Cesárea había una torre llamada Toráxico que según Flavio Josefo, el historiador judío poco después del tiempo de Cristo, tenía unas bolas de metal que las iluminaba el sol y resplandecían de manera que encandilaban a los caballos para que la carrera fuera más feroz. Esta torre estaba en el hipódromo de lo cual hoy solamente queda una columna. Era en el tiempo de los macabeos cuya era terminó alrededor del año 60 a. de C. Las fechas bíblicas fluctúan. Cesárea era una ciudad muy antigua y los macabeos estuvieron allí.
Se aprecia un hermoso acueducto romano que se conserva muy bien a pesar del tiempo y que tiene 12 Km. de largo. Está junto al mar y el fresco que se recibe debajo de sus arcos es encantador y alivia el cansancio del viajero.
(fotos 6 y 7)
Seguimos viaje por la orilla de la cadena del Monte del viñedo de D--s, el Monte Karmel, Carmelo. A lo lejos se vislumbra Haifa, una ciudad preciosa y la número 3 en tamaño en Israel. Haifa me fascinó por su estructura y su ubicación montañosa. Es una ciudad portuaria.
Almorzamos en Haifa en un centro de rehabilitación para veteranos y soldados de guerra adonde la familia los puede ir a visitar y tienen todos los adelantos modernos para su rehabilitación, en muchos casos, total.
Una comida sencilla, típica de facilidades médicas, pero que le deja sus donativos para mantener el lugar en buen estado aunque el gobierno lo subvenciona. El gobierno israelí es una institución al servicio del pueblo.
Haifa recibió un gran auge con la incursión de los Bahai. Allí construyeron un templo fabuloso que es una belleza arquitectónica. Bahai significa, camino de fe. Y, es en Haifa donde se encuentra la tumba del fundador de los Bahai, que cuenta con una feligresía de 7 millones. Para ellos, este templo es lo que es el Vaticano para los católicos romanos. Además, Sufis es como los cabalistas del Bahai. Algo como Elías en tiempos de Acab contra los profetas de Baal que significa dueño, proveedor. Fue precisamente en el Monte Carmelo donde se reunió, justo donde hoy se encuentra el templo Bahai. Allí acabó, por mano de D—s con los 450 profetas de Baal porque estaba en el:
1.            Monte cerca de D—s
2.            Sin agua, pero creyó en su Señor
3.            Tiempo de D—s y Elías lo sabía
[…] y los llevó Elías al arroyo de Cisón, y allí los degolló. (1° Reyes 18:40c)
[…] Y Elías subió a la cumbre del Carmelo, y postrándose en tierra, puso su rostro entre las rodillas. (1° Reyes 18:42b)
Continuamos nuestro peregrinaje y nos deleitamos con una vista extraordinaria en el Monte Maggedo, nombre antiguo que hoy se conoce como Meggido. Monte viene de Ar y al combinar ambos vocablos nos da Armagedón, cerca del Valle de Josafat donde se celebrará la batalla final de D--s contra Satán y sus huestes.
Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama Armagedón. (Apocalipsis 16:16)
Este valle fue el territorio de Zabulón y Neftalí y se dice que fueron muy especiales por hacer comentarios positivos y se portaron bien con D—s. Por eso les regaló las mejores tierras. Nazaret está entre Zabulón y Neftalí. Área de los jueces por la riqueza del suelo. (foto 8)
Los cananeos marcaron las bases para construir. Era un tipo de corte estratigráfico según la arqueología. Más abajo los cananeos, en el medio el área de Salomón y más arriba lo más moderno.
En Meggido los cananeos ofrecían ofrendas paganas. Una de las expectaciones del viaje fue entender la Biblia con vivencias y logramos mucho en el empeño. Armagedón fue impresionante precisamente porque esa vivencia es una profecía que está por cumplirse, pero se puede sentir su impacto en los tiempos escatológicos, que a nuestro modo de ver, se acercan a pasos agigantados. Es gozoso saber que los salvos por la misericordia de Dios a través de su Hijo no seremos parte de ese evento monumental porque el lugar nuestro está reservado en los cielos.
Continuando nuestro viaje, un tanto agotador por las emociones y lo mucho para ver y sentir en un período muy medido de tiempo. Se nos acercó a la vista Nazaret donde José tenía su carpintería y María guardaba en su corazón la magnitud de su Hijo. Allí creció Jesús y de allí fue al templo y se perdió en sus divagaciones con los doctores de la ley.
¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que en los negocios de mi Padre me conviene estar? (Lucas 2:49)
El Monte Tabor se nos presentó a la vista donde Jesús se transfiguró delante de sus discípulos, Pedro y Juan. Allí se presentaron Moisés y Elías. Moisés, el libertador del pueblo judío tuvo el privilegio de subir al Monte Sinaí y hablar con la deidad, lo que fue una teofanía o la aparición de Cristo porque a D—s nadie puede verle porque es Espíritu. Allí recibió la ley y según dicen los judíos cuando D—s le da la ley Moisés le pregunta que cuánto valía y al ver que era gratis, entonces pidió dos tablas. Ah, el humor judío es un poco distinto a nosotros los occidentales. Moisés vio muerte y hasta el día de hoy se desconoce donde D--s lo enterró. Elías fue llevado al cielo sin ver muerte porque D—s lo arrebató y será, según tradición judía quien anunciará Pesah cuando venga el Mesías. Entre el Monte Tabor y Samaría está el Valle de Ar Maggedo, ya mencionado. 200 millones contenderán con D—s. Israel actualmente está rodeado de 200 millones de enemigos. Es curioso cotejar ambas cifras y comprobar que concuerdan. De nuevo, vemos acercarse los tiempos escatológicos. (foto 9)
En las cercanías de este monte, en Naín, Jesús resucitó al hijo de una viuda. La Biblia a la mano sobrecoge y se desborda la emoción por eso las palabras nunca serán suficientes.
Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella, y le dijo: No llores […] y acercándose tocó el féretro; […] y dijo: Joven, a ti te digo, levántate. (Lucas 7:13-14)
Para los romanos una fortaleza, agua, comida, armas era de rigor. Las fortalezas se construían en lugares altos para protección. Vimos un monte artificial con un granero. El manantial desde abajo surtía el precioso líquido y hacían canales para que el agua corriera por la fortaleza. En realidad, la arquitectura y las técnicas romanas fueron fenomenales. Para llegar al manantial hay que bajar (y subir) 80 escalones.
En medio de todo el paisaje, de todo lo que hay que ver, también salta al oído las costumbres judías. Una de ellas es la de no comer el cordero en la leche de su madre. Hay un sentido filosófico detrás de todo este pensar. La leche es el elemento de vida primaria en la clase animal mientras que la carne es elemento de muerte. Vida y muerte coexisten, pero no coinciden en el plato judío. Por ejemplo, en Israel no se sirven hamburguesas con queso. Cuando Jesús brindaba, ofrecía pan y pescado porque el pescado no se considera carne. Todo se hace bajo supervisión rabínica. En Israel se come el parve o frutas que el país produce.
Andamos por la ribera del Mar de Galilea y no se nos pierde de vista. Parece inmenso, penetrante, habla por sí mismo. Fue un lugar muy importante durante la vida de Jesús en la tierra. Sus aguas son agradables y un deleite percibirlas a la distancia y el deseo de entrar en él se recrudece, pero hay que saber esperar el momento propicio. El Mar de Galilea está a 200 M bajo el nivel del mar mientras que el Mar Muerto está a 400. Por todos lados se ve la piedra llamada basalto, muy  típica de la región de Galilea. (foto 10)
El Mar de Galilea es de agua dulce y sus dimensiones son 21 Km. de largo y de 6 a 12 Km. de ancho con una profundidad de 48 metros.
Esa noche dormimos en Tiberiades. Ya era martes 13 de noviembre. Nos levantamos con el Mar de Galilea como fondo y esperando un día lleno de aventuras.
Al otro lado del Mar de Galilea se encuentra el Golán. Aquí otro apóstrofe para incluir una costumbre judía referente al Shabbath y el no trabajar en ese día de reposo. Trabajar es algo que no se precisa hacer, puede esperar. Lo que necesito, es una necesidad, no trabajo, Lo que hago y no necesito hacer, eso sí es trabajo. Bicua nefesh, si es para ayudar alguien, lo puedo hacer. La Mishna, que son los libros sagrados judíos permite ayudar en Shabbath. La túnica judía no tiene costura y en cada punta cuelgan cuatro flecos con nudos para recordar los preceptos. El buen judío debe cumplir 613 preceptos. Las tres fiestas principales son, Pesah, Pentecos y Sukot. A Israel se va buscando raíces.
Al caminar hacia el Golán, que es frontera con Siria, se ven campos minados porque era parte de Siria que perdieron con la guerra de los seis días en 1967.
Estamos ante el río Hasbanih, uno de los tres que forman el Jordán.
Estamos entrando en el Grotto del dios Pan. Lugar muy interesante cerca de los altos del Golán donde estaba el templo de Augustus en Cesárea. De este dios mitológico salió la idea del panteísmo que postula que todo es dios.  Pan del griego παν (Pan) que significa todo. Estamos ante las ruinas del templo a este dios y frente al lugar de las ofrendas que en griego es Τόπος προσφορές (topos prosgores). Esta inserción aquí es para referencia de quienes les interesa ahondar en todo este mundo falso de dioses creados y temibles.
Los nichos son de piedra y los dioses eran de piedra, inertes y sin poder escuchar. (foto 11)
Cuando Cristo le dijo a Pedro, usando el griego, πητρоς, piedra, usó un juego de palabras con el nombre de este discípulo. Luego usó la palabra piedra en griego, πητρα más grande, por sobre todas las piedras. Esta piedra grande que Jesús menciona, usando lo que le rodeaba, se refiere a sí mismo que es la roca de nuestra salvación.
 Y yo también te digo, tú eres Pedro, (πητρоς) y sobre esta roca (πητρα) edificaré mi iglesia; […] (Mateo 16:18)
Al seguir el viaje vimos kibutz o granjas colectivas que sirven también para protección del país. Hay lo que los israelíes llaman Kinat Monesh, áreas de artillería en caso de necesidad. Pasamos por Metula, el puesto más alto y frontera con el Líbano. Estamos a 5 millas de la frontera. Por toda esta zona hay bunkers o áreas subterráneas de refugio en caso de ataque aéreo. El israelí siempre está preparado, pero sin temor. Saben cómo defenderse en todo momento. En cada casa, edifico, escuela, etc. hay toboganes preparados para deslizarse inmediatamente que suene la sirena de alarma. Es obligación por ley de tener estos dispositivos porque los ataques a veces son seguidos.
Llegamos a las cercanías de Betsaida, del hebreo, casa de cazadores. Lugar del Sermón del Monte o Las Bienaventuranzas.
Bienaventurados […] (Mateo 5:3-12)
Hoy hay un convento de monjas carmelitas descalzas. Desde ese lugar pudimos ver Magdala, de donde era María Magdalena. Por otro lado divisamos Carpenaum. Lógicamente Jesús alimentaba a las multitudes al otro lado del Mar de Galilea donde los pescadores lavaban sus redes porque había 7 fuentes. Eran donde venían los peces y donde era más viable el que las multitudes se reunieran allí. (Opinión del guía judío que tuvimos y que es magistral en su exposición). En el lugar de las bienaventuranzas salen a pescar de noche porque la temperatura  del agua es de 44°C.
Después de la resurrección Jesús viene a este lugar y se da la pesca milagrosa.
Echad las redes a la derecha de la barca, y hallaréis. […] Jesús les dijo: Traed de los peces que acabáis de pescar. […] sacó la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; […] (Juan 21:6ª, 10, 11b)
(fotos 12 y 13)
Aquí Jesús enseñaba a sus discípulos y los alimentaba en la mensa Christi del latín, mesa de Cristo. Por estos alrededores le pregunta a Pedro tres veces si lo ama usando las tres formas del amor griego, αφαπε, ágape, θιλος, filos, ήρος, eros. Yendo en aumento de intensidad. El amor que Cristo quiere de nosotros es el más intenso e íntimo.
Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? […] Apacienta mis ovejas. […] (Juan 21: 17ª, c)
De ahí procedimos a nuestro viaje en bote por el Mar de Galilea. Salimos del puerto de Ginosar, o sea, Genesaret. Jesús enseñaba desde un barco en este mismo mar por el que navegamos en momentos espectaculares. Aquí tuvimos el privilegio de conocer a un pescador galileo, Daniel Carmel, y judío mesiánico. Es cantante cristiano y fue un instante de conexión íntima con mi Señor. El Mar de Galilea me llevó a los tiempos de Cristo y por ese mar navegué en Su compañía. Daniel comentó que conoció al Señor por medio de tantos cristianos en peregrinaje por el Mar de Galilea. Los cristianos debemos procurar no hablar de Cristo, si no vivir a Cristo. Daniel nos deleitó con cantos mesiánicos hebreos entre ellos, Adonai, Elohim, Shavuot y nos deleitó con Cuán Grande es Él en español. Fue el clímax de mi viaje a Israel por eso digo que mi vida cambió en Galilea.
Tuvimos una especial presentación por parte de nuestro hermano Fernando Alfonzo quien nos cantó, Sobre las aguas, y eso fue casi ver a Jesús caminando junto a nuestra barca. La voz de Fernando inundó todo el ámbito y el manso oleaje de ese mar chocaba con la barca produciendo una música sublime. En realidad que Jesús fue el humilde Maestro de Galilea y nosotros sentimos Su presencia en medio nuestro. Israel es un cofre lleno de sorpresas. (fotos 14 y 15)
A través del paseo vimos campos de datileras impresionantes. Dan ganas de saltar de nuestro hogar móvil y caminar por medio de los trillos. El dátil fresco es delicioso, mucho más sustancioso del que se vende en Occidente. Ya se había acabado la temporada, pero pudimos comerlo envasados, pero fresco. Son más grandes que el que conocemos y con una semilla bastante larga. Hay 11 variedades de dátiles en Israel. (foto 16)
Ese día almorzamos en Beth Gabriel, un restaurante de una benefactora de Israel quien perdió al esposo y a su hijo, Gabriel.  El restaurante es en memoria del hijo. Delicioso almuerzo y los dátiles cocinados estaban exquisitos. Fui recogiendo de mesa en mesa los que no se comieron los demás. Un poco más y sufro empacho de dátiles israelíes. Pero, habría sido un empacho con gusto y “el que por su gusto muere, la muerte le sabe a gloria”, según una de nuestras buenas paremias. Me encanta el sabor de nuestra lengua en la que podemos expresar lo que de veras toca nuestro corazón. (foto 17)
Después del sabroso almuerzo y por aquello de que “barriga llena, corazón contento”, seguimos adelante conversando sobre la zona y la época de las cruzadas. Fue todo a base de guerras, pero la perdieron el 4 de julio de 1187. Los pobres soldados de Saladino fueron literalmente cocidos por las temperaturas altas de verano vestidos con la ropa de los soldados españoles. Mientras hablábamos amenamente, atravesamos la Caná de la Galilea. Todo tan interesante como emotivo.
Seguimos dando trote y llegamos a Nazaret, una ciudad dividida entre dos culturas, la árabe musulmana y la israelí, pero conviven. Allí visitamos la Iglesia de la Anunciación impresionante y con un hálito de cirios. Allí están los franciscanos que son quienes atienden todas las ceremonias de la iglesia. Son impresionantes las puertas de madera tallada con la historia del nacimiento de Cristo y las inscripciones en latín, Verbum caro factum est et.Habitavit in nobis, total que nadie los lee y si algunos los leen, son pocos los que los entienden. El culto a María es muy pronunciado en este lugar.
 En la especie de sótano se encontró una piscina para purificación lo que indica que fue el asiento de una sinagoga. (foto 18)
Nuestro día terminó con algunas compras y se hizo de noche. En Israel, en esta época del año, oscurece a las 5 de la tarde. De regreso al hotel comimos conversamos y nos fuimos a descansar después de un día lleno de emociones.
Hoy es miércoles, 14 de noviembre de 2012, otro día más para disfrutar esta gran nación que con tanta acogida recibe al turista. Un día interesante porque vamos a Capernaum y al río Jordán y luego subiremos a Jerusalén. Jerusalén, para el pueblo judío, significa recordar la casa de D—s y las fiestas, Ishma Yisrael, Adonai, Elohino, Adonai
Estamos pasando de nuevo por Magdala, la Magala bíblica de la que hablamos y hogar de María Magdalena o María de Magdala. Estamos en una sinagoga del siglo I donde se encontró un altar con diseño muy especial como el templo. Il agoga, bet keneset (sinagoga), lugar de reunión, eso era la sinagoga en los primeros tiempos. Allí se reunían para ventilar cualquier asunto pendiente y concerniente al pueblo. Esto ocurre en los alrededores de Nahúm, Hafar Nahum. En hebreo todos los nombres tienen su significado. Por ejemplo, ya mencionamos que Betsaida quiere decir, casa de cazadoras mientras que Betania, casa de la pobre. Así como Betfagé, casa del médico y Getsemani, prensa de aceite, nombre que adquirió porque se extraía mucho aceite en el lugar. (fotos 19 y 20)
Ya entramos en Capernaum donde generalmente hace mucho calor por eso los techos tienen vigas de madera con hojas de árboles lo que permite al viento que refresque y dé sombra por el día. El paralítico fue bajado por este tipo de techo. Aquí se hicieron muchos milagros.
Y como no podían acercarse a él a causa de la multitud, descubrieron el techo de donde estaba, y haciendo una abertura, bajaron el lecho en que yacía el paralítico. (Marcos 2:4)
Bret milan, día de la circuncisión, un pequeño apóstrofe en medio de la narración y siempre resulta en un pequeño descanso mental.
En la sinagoga en Capernaum las columnas son típicas romanas. Esta edificación se construyó en tiempos de Adriano. El capitel de la columna es típico pagano, pero le tallaron una menora. La columna pequeñita tenía una concha y dentro está la perla. Se observan dos idiomas el arameo y el hebreo antiguo, que son las lenguas bíblicas. Esta sinagoga es más moderna, en los tiempos de Jesús. Un dato muy curioso, la puerta central se cerraba con las Sagradas Escrituras; entonces la sinagoga era  lugar de oración y se entraba por la puerta estrecha.
Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición y muchos son los que entran por ella. (Mateo 7:13)
Jesús se expresó de acuerdo a lo que le rodeaba lo cual resulta muy interesante. No había excusas para que no lo entendieran. Todo en Jesús obedece al tiempo perfecto, no se adelanta ni se retrasa.
Aquí Jesús habló y les anunciaba lo que había de pasar.
Frente a nosotros se aprecia una hermosa iglesia greco ortodoxa con torres doradas muy cuidadas. Dentro de la otra iglesia se ve la piedra que es testimonio de acontecimientos (si las piedras hablaran…). El guía nos mencionó que para ellos es señal de perfección porque  se le añade al Mesías que están esperando, por eso se encuentran hexágonos. Se encuentran 8 pilares según el catolicismo.
* es un símbolo del catolicismo que significa Cristus porque en griego las dos primeras letras del nombre de Cristo son X y P (ΧΡΙΣΤΟΣ).
Estrella siempre es señal de inicio. Curiosidades que se cuelan en el deambular por tantos lugares interesantes.
La piedra fuera de la iglesia tiene una concha que representa las Sagradas Escrituras.
Se ven cuatro columnas como en el templo en la entrada principal. La puerta debajo de la concha recuerda al templo. Las ruedas debajo dan idea de transportación –al templo o al tabernáculo.
La vida pública de Jesús comenzó en Caná de la Galilea. En las bodas de Caná fue donde Cristo dijo, Aún no ha venido mi hora. (Juan 2:4b) Todavía no podía revelarse porque el tiempo de D—s es perfecto. En aquellos tiempos había tinajas con agua para purificar, que era realmente, el único propósito de esta agua y no se podía usar para nada más. Esta agua fue la que usó Jesús para convertirla en vino. Les mandó a sacar el agua de la piscina de purificación. Cristo no agarró cualquier agua, pero la de la purificación, lo cual es notable y una señal; el milagro ocurrió cuando convirtió esa agua en vino. Señal porque se entendía que purificaba. Nosotros sabemos que Cristo es el vino (sangre) que purifica por dentro y desde adentro. La transformación del agua en vino es interesante porque en nuestras vidas Él transforma y produce una nueva vida.
Después de esto fue a Capernaum y salió para Nazaret. El Espíritu de D—s descendió sobre Él en la sinagoga y leyó las profecías y lo sacaron y quisieron arrojarle por un precipicio porque había antecedentes. De allí regresó a Capernaum. Jesús tuvo que preparar a la gente, lo cual sigue haciendo hasta que venga en Su gloria.
Después de la destrucción del templo, las sinagogas se hacían más grandes. Otro dato intercalado, pero de un valor incalculable para los estudiosos de las Escrituras.
Entró luego a casa de Pedro y le sanó a la suegra. La gente se acercaba a Jesús donde había una civilización apreciable. La Vía Maris pasaba cerca y era la vía de comunicación más importante de aquellos tiempos. La piedra de la zona era basalto, producto tectónico. Se encontraron 30 prensas de aceite en piedra de basalto. Se consumía aceite puro de oliva y todavía hay olivas por toda la zona. (fotos 21 y 22)
Para prensar la oliva se ponían distintos niveles de aceitunas y encima se ponía una viga de madera y al presionarla iba saliendo el aceite. Todo aceite es producto de presión, no importa el método. El virgen eran las primicias lo cual era muy especial y la tercera parte iba para el templo.
El propio peso de las aceitunas va a hacer que salga el líquido sin presión humana, es presión natural, de D—s.
Pasamos por Betsaida y Gadara.
Aquí se mencionó, entre las constantes conversaciones, parte histórica, parte explicación de los lugares por los que transitábamos y parte el aspecto político que en Israel es una realidad diaria. Se dice mucho cuando se habla de tropas en la antigüedad que el comandante de una tropa no dice al ataque si no “síganme”. Va el oficial primero y si hay que morir, es el primero. Las cuestiones bélicas han cambiado mucho con el tiempo y ahora entran las negociaciones y la dirección de combate por otros medios. Se cuenta que Henry Kissinger fue el intermediario entre uno de los conflictos de Siria con Israel. Ambas partes, Siria e Israel, dijeron, “no hay negociaciones”, a lo cual Kissinger respondió, “ya tenemos un punto en común, comencemos las negociaciones.”
Entramos en zona de los kibutz que según nuestro guía, la vida ha cambiado enormemente porque el modernismo ha entrado en los kibutz. Antes los trabajos se hacían  distributivamente. En la década de los 80 con el avance de la industrialización se acabó la idea del trabajo comunitario.
Por toda la zona, sea norte o sur se ven muchas plantaciones de plátanos.
Continuamos en nuestro hogar sobre ruedas y pasamos por B´shea donde murió Saúl. Seguimos contemplando toda la tierra israelí y nos topamos con Skitópolis, ciudad de columnas del skito, columna y polis, ciudad. Era la antigua Decápolis que se menciona en la Biblia en tiempos de Jesús. Hay otra más nueva que se llama Neacápolis, o ciudad nueva.
Estamos en Samaría, nótese que Israel no se dice Samaria, si no que le pone acento en la í y entonces al romper el diptongo la pronunciación se altera. A unos cuantos Km está el pozo de Jacob en Siquem. Pasamos por la tierra de Efraín, todo cerca de la frontera con Jordania. Israel tiene 400 Km de frontera con ese país.
Se ven carteles azules de las Naciones Unidas de lo que era o es UNWRA (United Nations World Refugee Area). Arafat no quiso hacerse cargo de esta zona y las Naciones Unidas tuvieron que asumir la responsabilidad de su funcionamiento. Es la vida en Israel y sus contornos. Inclusive hay diferencias en las placas de los coches. A los palestinos se les dan placas blancas mientras que los israelíes las llevan amarillas. Es una identificación inmediata.
Seguimos la trayectoria y pasamos por el Monte Gilboa donde murió Jonatán y David vino a este monte a llorar a su amigo.
En 1967 Israel tomó lo que se llamaba Sisjordania y por eso hay islas de palestinos como la Franja de Gaza y Jericó, es la Banca Occidental. A Jericó se divisa con bastante claridad en las cercanías, pero siendo territorio palestino, no se puede visitar. En esta cercanía hay una carretera moderna, como todas en Israel que lleva a Ben-Gadi.
Seguimos camino ya de regreso a Jerusalén con una puesta de sol espectacular y pasamos por Betania, hogar de Lázaro, Marta y María donde Jesús resucitó al amigo y donde María escogió la mejor parte a los pies del Maestro. (foto 23)
Entramos a Jerusalén pegadito al Monte de los Olivos, a las 5:45 pm. Jerusalén está a 210 pies sobre el nivel del mar. A lo lejos la cúpula musulmana y debajo estaba el monte donde Abraham llevó a su hijo, Isaac, para sacrificarlo. David trajo el arca del testimonio a ese lugar y luego Salomón construyó el templo.
Frente al Monte de los Olivos comenzamos a oír el canto de los musulmanes desde sus minaretes. La mezcla de razas y nacionalidades, así como creencias  componen la amalgama de la tierra santa.
Jesús decidió ir a Jerusalén para no volver. Iba por el Monte de los Olivos. Cuando terminó fue a Getsemani (prensa de aceite). Desde el Monte de los Olivos se ve Yerushalayim y se ve el templo, hoy mezquita musulmana en honor a Mahoma adonde dicen que llegó en su caballo con alas, Alburec. Ahora es un lugar sagrado de los musulmanes. Solamente pueden entrar los hombres para orar a Alah. Da angustia contemplar esta mezquita a los lejos en la bruma de la prima noche donde una vez estuvo la casa de D—s. (foto 24)
Nosotros estamos ante esa Jerusalén de D—s mirando a la distancia lo que fue, lo que e, lo que será. Nos sentimos el corazón fruncido por el dolor de la muerte de un justo por los injustos y sin embargo, Jerusalén no ha reaccionado. Allí brindamos por la paz de Israel y yo, en mis adentros, quería ver el regreso de mi Rey en ese momento. (foto 25)
Después Jesús, en Getsemani, se postró en tierra y sudó sangre. Salió líquido de Su carne sin presión de afuera. Fue allí donde le dio las primicias de Su sacrificio a D—s. Luego salió otro líquido con presión de afuera, los maltratos y la crucifixión.
Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra. (Lucas 22:44)
Otra interjección curiosa,
Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos. (Mateo 8:11)
Otro día lleno de emociones y aventuras por los lugares que pisó Jesús durante sus 33 años en esta tierra. Una buena noche de descanso es necesaria para continuar mañana en otra faena por encontrar el recuerdo del humilde Maestro de Galilea.
Comenzamos nuestro jueves, 15 de noviembre, 2012 en Jerusalén viendo árboles en el desierto de Judá y camino al Monte de los Olivos. Entramos por el lugar del Pater Nostro, ya en Monte de los Olivos, un área verde en medio del desierto. El Monte de los Olivos está frente a Yerushalayim, ciudad de David. Fue un día de sombra y agua y muy agradable estar fuera de la ciudad. Es un área abierta, pero en el pasado había un área cerrada para guardar el producto del olivo.
Había un enorme hospedaje para los que venían con otros al templo en peregrinaje a Jerusalén. Durante las fiestas llegaban alrededor de 100,000 personas y la ciudad tenía en aquel tiempo como 400,000 habitantes. Los apóstoles le preguntaron a Jesús que adónde se quedarían. Jesús les contestó Eleona del griego Σληονα, cuyo significado es olivos (Monte de los Olivos).
Otro dato inserto en medio del viaje de descubrimientos. Hay 100 millones de cristianos en China y siendo los egipcios los primeros monjes de la era cristiana, fueron quienes llevaron el evangelio hasta el oriente. Armenia fue el primer estado cristiano del mundo.  (amén en hebreo).
Otra curiosidad, nunca fuera de lugar, arca es característica y recordamos el pasado a través de Moisés.
Los macabeos recuperaron el templo y no encontraron aceite y tuvieron la actitud, Tse ma Yeish, lo que será, será. Mañana D--s proveerá y al siguiente día había aceite para el templo. Para hacer aceite de las primicias, es de rigor para el templo, había que esperar 8 días. Se usaba para la menora (candelero) del templo que tiene 7 brazos de un solo pedazo. Para Chanukah se usa la menora de 9 brazos para recordar la fiesta de las luminarias. Los macabeos lograron aceite para 8 días en un solo día. Esto recuerda la fe que pusieron en D--s.
Entramos al campo de sangre. Cerca de la mezquita a la derecha desde el Monte de los Olivos, estaba la Fortaleza Antonia, donde funcionaba Poncio Pilatos, como ya se mencionó anteriormente.
En el siglo VII, 622, Mahoma, del yihad islámico, conquista la Meca y en 638 conquista a Jerusalén en lo que le llamaron la guerra santa. El Corán cita a Abraham quien iba a sacrificar a Ishmael, no a Isaac. La mezquita en memoria a Mahoma es octogonal que recuerda al cristianismo. Los musulmanes copian del cristianismo muchos aspectos, así como de la Biblia en todo sentido. Cambian y tergiversan la historia para sus propósitos.
La muralla de la ciudad que vemos, tiene arcos mirando al lado oriental. Cuando venga el Mesías por el Monte de los Olivos entrará a la ciudad por una de las puertas de la muralla, mencionado anteriormente, los huesos secos de que habla Ezequiel, se levantarán. Camon y camojas del hebreo, “yo como tú”.
Otra inserción, esta vez sobre la razón de las piedras en las tumbas. Las flores se secan y no queda nada; la piedra no muere y eso recuerda al amor que es eterno.
Seguimos adelante para  nuestro encuentro con el río Jordán, lugar de bautismo de Juan el Bautista y donde se bautizó Jesús. El lugar exacto de Su bautismo se desconoce, pero son muchos los que quieren bautizarse en ese río por emular en deseo a Jesús. Para otros, como en el caso mío, me pareció prudente no hacerlo porque guardo el recuerdo vivo y tierno del día en que decidí hacerlo y lo hice para Cristo de una vez y por todas. No digo que no lo haría en el futuro si siento ese deseo. Lo cierto es que quienes lo hicieron sintieron mucho gozo y hubo experiencias muy sentidas de ese momento.
La entrada interesante al área de bautismos está bien regulada porque son muchos los que visitan el lugar. Las aguas del Jordán no son muy limpias. (fotos 26, 27 y 28)
Salimos del Jordán para continuar descubriendo los secretos de Israel y al regresar a Jerusalén llegamos a otra vista de lo antiguo donde estaba el templo, hoy mezquita musulmana, y pudimos ver la casa de Caifás que aun se conserva. Era en el Monte Sión que forma parte de la Jerusalén antigua, parte donde están los palestinos.
En la foto podría encontrarse la casa de Caifás a la izquierda de la cúpula de la mezquita y un poco a la derecha de la torre del  minarete. Tiene el techo rojo y se ven dos aberturas o ventanas  que se aprecia en la vista de esa parte de la ciudad. Evidentemente Caifás, el sumo sacerdote en tiempos de Jesús, vivía muy cerca del templo.  Era el lugar por donde Jesús transitaba con mucha frecuencia y nunca lo aprendieron por temor al pueblo.
Cada día estaba con vosotros enseñando en el templo, y no me prendisteis; pero es así, para que se cumplan las Escrituras. (Marcos 14:49)
(foto 29)
La idea de los osarios es para que se permita enterrar a otro muerto. Pero, Jesús fue enterrado en sepulcro nuevo porque no había otros huesos allí. La santidad del Hijo D--s se protege siempre porque es D—s mismo quien lo hace. Aunque no en la Biblia, aunque sí se menciona, muchos religiosos hacen mucho hincapié en el sepulcro nuevo y los verdaderos creyentes enfatizamos en la tumba vacía.
Estamos viendo el Valle de Josafat que se extiende muchísimo y toca a Armagedón, pero en realidad es parte donde está Jerusalén. Desde el Huerto de Getsemani, sin acento como se dice en Israel, se abarca una vista hermosa de la ciudad y allí hay iglesias, una en particular se le llama de la lágrima porque recuerda cuando Jesús lloró sobre Jerusalén.
Y cuando llegó cerca de la ciudad, al verla, lloró sobre ella, […] Lucas 19:41)
(foto 20)
Desde donde estamos se puede ver una preciosa iglesia ortodoxa rusa y donde Pedro y Juan no pudieron velar en oración con Jesús en Su agonía. (fotos 31 y 32)
Dejamos el Huerto de Getsemaní sin deseos de salir de allí. El recuerdo del sufrimiento de Jesús es violento cuando se pisa donde Él oró y sufrió por nuestros pecados. Ese es el Salvador tan inmenso que tenemos y con Su vida aseguró nuestra libertad.
Entramos en el área del Monte de Sión, tan interesante en la historia del pueblo judío. Allí se encuentra la Iglesia de la Dormición de la Virgen y entramos a lo que se conoce como el cenáculo o el aposento santo donde Jesús repartió la cena a Sus discípulos. El cuarto es pequeño y el estilo de las columnas es romano, pero cada una muestra un diseño distinto. No hay evidencia alguna de que el lugar donde estamos fuese en realidad el aposento alto; es más tradición que otra cosa. Lo curioso de todo este episodio en la vida de Jesús, aparte de si es o no el supuesto lugar, es que Él les instruyó a los discípulos que un hombre llevaba un cántaro con algo dentro. Lo extraño de esto es que en aquellos tiempos eran las mujeres las que llevaban los cántaros con agua para donde fuera necesario. Israel aclara muchas cosas culturales que nos ayudan a entender con más claridad la Palabra de D—s sin que esto merme la soberanía de ella en la vida del creyente.
La tradición renacentista tiñó la Santa Cena con irregularidades porque se impuso la costumbre del siglo XVI y no lo que en realidad sucedió en aquel memorable momento para la cristiandad.
La mesa o diván (más diván que mesa)  que se usó para este propósito se llama triclinio, cosa que aunque la sabemos, la imagen de la Cena de Da Vinci permea en nuestro cerebro. Esta mesa o diván consta de tres partes y deja el centro abierto para que el sirviente pueda servir. La figura principal se sentaba a la izquierda y en el segundo lugar para que todos pudieran verle. Jesús estaba recostado en Su lado izquierdo según la costumbre, y Juan recostado sobre su pecho. Es una cena muy especial, es Pesah y ahí comienza el nuevo pacto. Jesús lavó los pies de sus discípulos, en calidad de sirviente en ese momento, para demostrar una lección de humildad. Se ató la toalla al cinto de Su manto para poder seguir caminando hasta cada uno de ellos. Terminada la cena se fueron al huerto de Getsemaní.
Otra inyección de conocimiento y fuera de contexto, lo cual es un pretexto para despejar la mente de tanto pensar y de querer asimilar más de lo que quizá le quepa. Un alto en el camino siempre produce descanso. El pelícano es el único animal que cuando sus hijos tienen hambre, es capaz de alimentarlos con su propia sangre. Un comentario muy a tono con las vivencias que estamos experimentando al caminar donde Jesús caminó. Y, así, después de este pequeño receso mental llegamos a la tumba del rey amado del pueblo  judío, David, precisamente en la ciudad de David, Jerusalén. Se acostumbra a que la mujer se cubra la cabeza al entrar a lugares que los judíos consideran de mucho respeto. No todas lo hacen, especialmente quienes van de visita y desconocen esa costumbre. Muchas mujeres judías no necesitan ponerse un manto o velo porque llevan pelucas que cubren sus cabezas y no se les ve el pelo. No teniendo otra cosa a la mano más que el sweater que llevaba conmigo, lo usé para no romper la tradición judía. Gracias a la querida hermana, Teresa Aguiar, por la foto que me tomó en el lugar. (foto 33)
Seguimos nuestro andar para entrar en la Jerusalén vieja y llegamos a la Puerta de Sión donde apreciamos huecos en la pared o muralla que son testimonios de los conflictos  bélicos que ha sufrido Israel. Allí vimos el ojo de la aguja. (foto 34)
Entramos a la Jerusalén antigua por la Puerta de Jaffa y mientras continuábamos  nuestro caminarse suscitaron preguntas sobe la comida y los precios de las propiedades en Jerusalén lo cual resultó muy interesante. No solamente se encuentra en un viaje lo que se va buscando si no que el diario vivir salta a la vista sobre todo en un lugar tan cosmopolita donde los seres humanos se desplazan como en cualquier otra ciudad del mundo.
En esa zona se usa mucho el cardumen para condimentar las comidas. En un barrio elegante el m2 que equivale a 10 pies2 tiene un valor de $12,000. Una casa de dos habitaciones puede costar medio millón de dólares en un barrio medio. En cuestión de alquiler se calcula el 0.4% del valor del departamento y el alquiler puede llegar al monto de $2,500 al mes. Es caro vivir en Jerusalén. Como siempre me pasa, porque voy y vengo cuando lo que sale a relucir me interesa poco, aunque no deja de ser una forma de ver al Israel moderno, yo pensaba en el Jesús de Nazaret, humilde sin nada a su haber en la tierra y no pude menos que comparar ambas épocas. No llegué a ninguna conclusión.
Estamos en el Centro Evangélico frente al Gólgota o el Monte de la Calavera donde han recreado la tumba de Jesús basado en descubrimientos arqueológicos bastante recientes. Aquí tomaremos la Santa Cena. Frente a este lugar está la terminal de ómnibus musulmana. (foto 35)
Mi Cristo camino al Calvario, es un momento sobrecogedor ante tanto barullo y tantas ansias de remontarse a esos instantes en la vida terrenal del Señor. Existe la Iglesia del Santo Sepulcro que visitamos y de la cual hablaremos más adelante. Esta iglesia, y muchas más,  la construyó Constantino que fue el emperador romano que hizo del cristianismo la religión del estado plagada del sincretismo de esos días. La madre de este emperador, Helena, se convirtió al cristianismo y fue la primera mujer que fue en peregrinación a la tierra santa. Fue el momento en que se consolidó la Iglesia Católico-romana y por influencia de Helena se construyeron iglesias en lugares donde supuestamente había estado y vivido Jesús. Años más tarde, las excavaciones arqueológicas demostraron otra realidad, pero las iglesias han quedado y proclaman que sus sitios son los bíblicos.
En 1977, un arqueólogo griego y un teólogo alemán se trasladaron a Israel con el propósito de buscar sitios que pudieran ser en los que sucedieron hechos bíblicos. Se descubrió lo que se conoce como el Monte de la Calavera porque muy claramente se ve una calavera en la ladera de este pequeño monte, hoy un lugar de mucho ajetreo comercial y de negocios, sobre todo de palestinos. Se supone que la crucifixión tuvo lugar al lado de un camino transitado porque de Jesús se burlaban. Se deduce que las crucifixiones se hacían justo por donde transitaba la gente. Los soldados romanos no subían ninguna colina para la crucifixión. La tradición dice monte; los evangelios solamente hacen referencia al lugar. Además, se descubrió una capilla bizantina del siglo V donde se encontró una cruz que tenía en la parte de abajo un ancla, símbolo del cristianismo del siglo V. Este hallazgo fue en las catacumbas romanas.
La cual tenemos como segura  y firme ancla del alma, […] (Hebreos 6:19)
Hay tres aspectos a considerar sobre esta opinión reciente del Monte de la Calavera:
1.            Semejanza bastante clara de una calavera en la ladera del monte. Apariencia del lugar. Y le llevaron a un lugar llamado Gólgota, que traducido es: Lugar de la Calavera. (Marcos 15:22)
2.            Proximidad con la ciudad antigua. La muralla de la ciudad se afirma en la base original. Este monte está fuera de los muros. Encaja dentro del marco bíblico. […] el lugar donde Jesús fue crucificado estaba cerca de la ciudad, […] (Juan 19:20)
3.            Tradición local. Desde el siglo XIV decían los judíos que en ese lugar se ajusticiaban a los criminales.
Estos elementos ayudan a situar los acontecimientos en este lugar. A continuación se puede ver una foto del monte antes de que se construyera un túnel que le tapó lo que luce como boca. Al lado una foto del monte como se ve hoy.
(fotos 36 y 37)
Cerca había un huerto y una tumba nueva. Los tres lugares muy próximos –muerte/crucifixión/tumba-  Cerca se encontró una cisterna de agua muy grande, como la mitad de una piscina olímpica. Inclusive, en 1934 los arqueólogos encontraron una prensa de vino del primer siglo en tiempos de Jesús. En ese mismo lugar había una tumba nueva donde nadie había sido enterrado, en unas páginas atrás se mencionó este hecho.
Y en el lugar que había sido crucificado, había un huerto, y en el huerto un sepulcro nuevo, en el cual aún no había sido puesto ninguno. (Juan 19:41)
La única tumba del lado de acá del muro parece ser que era de una familia privada. Entramos a lo que se cree con más veracidad ser la tumba de José de Arimatea y sepulcro de Cristo.
Tuvimos un momento de quietud y nos reunimos en una salita para participar de la Santa Cena que nos habían preparado ahí a pocos metros de la tumba.
(fotos 38 y 39)
De ahí salimos regocijados y entramos de nuevo a la ciudad vieja por la Puerta de Damasco, puerta nueva del siglo XVI; la puerta antigua es muy baja. Anduvimos por la Vía Dolorosa donde observamos piedras originales que removieron al colocar las cloacas y las pusieron de nuevo para mantener el pasado vivo.
Algunos datos sueltos, pero interesantes sobre Jesús vienen a colación. La túnica de Jesús era de material púrpura (de tinción, de tinta). La púrpura proviene de unos caracolitos que pudimos ver y tocar en el Mar de Galilea.  Se les saca el animalito y se tritura la concha pequeñita y se extrae el color púrpura. Era una túnica sin costura muy preciosa por eso los soldados se la echaron a suerte por no echar a perder el material.
La cruz tenía una base para que el crucificado no muriera muy rápido. Eso evitaba que el agua y la sangre del cuerpo llegaran a los pulmones y lo asfixiara. De la otra forma el agua y la sangre no suben y así la muerte es más lenta. Sentarse cerca de la cruz o en las casas era señal de luto. Esto lo hacen los judíos hasta el día de hoy.
Fuimos a la iglesia católico-romana del Santo Sepulcro donde hay una piedra que supuestamente era la que selló la tumba de Cristo. (foto 40)
La pasión es tal que las personas se tiran sobre esta piedra, lloran y la tocan buscando sensaciones supernaturales. La capilla es pequeña, pero la iglesia es enorme con pasillos y parajes que no parecen tener uso. Allí había un grupo de frailes con los botafumeiros echando incienso y en una liturgia que parece ser lo que ellos llaman el tedeum que es una celebración solemne para ocasiones muy especiales y hay un himno que se llama Te Deum que parece lo escribió un monje de nombre Ambrosio en el siglo IV.
Seguimos el curso de nuestro andar y llegamos al palacio de Herodes, monumental a pesar de los años. En un bello crespúsculo regresamos al hotel para darnos un buen baño de descanso para luego regresar a la ciudad encantada y llena de historia. El día lleno de descubrimientos aumentó el deseo de absorber a toda esta tierra que es parte de la vida del cristiano “porque en su seno se derramó, la sangre, bendita sangre del unigénito Hijo de D—s como reza un himno hermoso de mi niñez. Los recuerdos se mezclan y parecen ser una sola cosa a medida que aumentamos lo que vamos depositando en ellos, lo que vamos viviendo y sintiendo en nuestro andar por el mundo. Jerusalén se adentra hasta por la piel porque el alma se embarga de una serie de sensaciones que la van moldeando y la hacen más sensible.
Llegamos al Muro de los Lamentos, un momento verdaderamente impresionante y quizá visita que solamente valga Israel. El muro o fragmento de él fue lo quedó después de la destrucción del templo en el año 70 d. de C. Tito era e emperador en aquel momento fatídico. Las ruinas de las fortificaciones y el palacio de Herodes quedaron, según Flavio Josefo, para constancia de la importancia de Jerusalén. En 135 d. de C. Adriano, un emperador que odiaba a los judíos, decidió reconstruir la ciudad, pero le cambió el nombre a Aelia Capitolina en honor a su familia Aelius y a los dioses capitolinos Júpiter, Juno y Minerva. El paganismo en su mejor expresión.
Israel pasó por muchos períodos tristes y de conquistas. Los cruzados quisieron conquistarla y al fin fueron derrotados y así continuaron los turcos, los ingleses y al fin la independencia, a grandes rasgos de la historia. Durante la colonización inglesa los judíos no eran admitidos en Israel, errantes de su tierra hasta 1948 en que lograron la independencia y luego, como ya se mencionó anteriormente, en 1967, con la guerra de los seis alcanzaron la reunificación de Israel. Estuvieron los judíos 19 años sin poder llegar al Muro de los Lamentos, lo único que había quedado del templo. El sufrimiento del pueblo de D—s no tiene parangón en la historia de la humanidad, pero Su voluntad se cumple con un propósito. Moshe Dayán, un gran estratega militar quien procuró tratados de paz y gracias a su estilo de diplomacia, aunque también atacó y peleó por su país cuando tuvo que hacerlo, se logró la Asociación Árabe y  Unidad Mundial durante el famoso trato de paz con Egipto con la responsabilidad de supervisión del territorio.
El templo, que hoy es mezquita, va de oriente a occidente. Los judíos esperan el Mesías que dicen entrará por la puerta oriental. (foto 41)
Otras de las curiosidades a que estuvimos expuestos con mucha frecuencia y en el Muro de los Lamentos, muy lógica instrucción histórica judía. El sumo sacerdote enraba al Lugar Santísimo levantando un poco el velo por debajo para evitar que otro sacerdote viera nada en su interior. Este dato lo recoge el Talmud, תַּלְמוּד, textos sagrados rabínicos del judaísmo y segundo después de la Torah. El Talmud también se le llamaba y aún se le llama Shas que tiene que ver con las leyes judías. Además, dice la tradición que los sumos sacerdotes cuando entraban una vez al año al Lugar Santísimo llevaban un cencerro atado al pie izquierdo para que los otros sacerdotes supieran que estaba vivo ante la presencia de D—s. Si moría lo halaban sin tener que entrar al Lugar Santísimo, lo cual era prohibido por D—s mismo.
El muro occidental es más transcendente porque fue lo único que quedó en pie durante la destrucción del templo o casa de D—s.
Los que oran en el Muro de los Lamentos se agrupan en el lado oriente. Para hablar con D—s se hace con todo el corazón y se mueven hacia el muro para hacer acercarse más a D—s. En esa relación íntima con D—s entran la mente, el corazón y todas las fuerzas del alma. Ahí se dice la oración de la semana, Pará de la Shama.  Cuando el judío va a recordar a D—s se pone una cajita en el brazo izquierdo y en la frente, que son las filacterias que contienen un pergamino con lo mandado por D—s por medio de Moisés.
Y amaras a Jehová tu D—s de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. […] Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; (Deuteronomio 6:5, 8)
(fotos 42 y 43)
Los lunes, jueves y sábados se leen las Escrituras y los niños de 13 años se llevan bajo la jupa al Muro a hacer su Bar Mitzva. Van cargando la Torah y preparan unas mesas para poner todo y los niños leen de las Escrituras con el puntero de guía bajo supervisión para cerciorarse de que no cometen errores y luego cuando termina la ceremonia se levanta la pesada Torah en alto y comienzan los gritos para celebrar. Las madres, en el lado de las mujeres, se encaraman en sillas y escaleras y arrojan caramelos y golosinas para unirse a la celebración. Es muy emocionante. Las piedras que se ven en el Muro son del templo de Herodes que era el que visitaba Jesús. El templo ocupaba ½ km o 1,500 pies.
Participamos en la celebración de niños llegando al muro bajo la jupa llevando la Torah. Los familiares ocupan músicos con panderos que tocan música judía, entre ellas el Hava Nagila que bailamos un grupito con gusto. Las familias  nos aceptaron con mucho gusto e hicieron que nos integráramos con ellos.
Salimos del Muro siguiendo camino y para muchos abriendo caminos. Vimos a la distancia a Jeena, lugar donde se ahorcó Judas Iscariote, lugar considerado por muchos, maldito. Esto hizo después de arrojar las 30 piezas de plata en el templo.
Y arrojando las piezas de plata en el templo, salió, y fue y se ahorcó. (Mateo 27:5)
Seguimos y llegamos a uno de los lugares más trascendentales del viaje, el Mueso del Holocausto, impactante y muy conmovedor donde todo el mundo se siente judío de corazón. Ante se sabía poco del holocausto, pero a medida que las víctimas de este genocidio fueron emergiendo, se ha ido completando la historia y por eso se han podido recrear los grandes sufrimiento del judío durante los años 1930…
Al no poderse tomar  fotos dentro del lugar, las escenas se graban en el alma sin reproducción, pero basten las palabras conmovidas y conmovedoras para darnos una idea, muy pobre, de la realidad.
Un poco de historia ayuda a entender los sinsabores vividos por millones de seres humanos sin culpa. En 1933 Adolfo Hitler sube al poder con minoría de votos. En 1935 comienza su política de superioridad y en 1936 suceden los juegos olímpicos en Berlín
Ya en 1938 a Hitler Alemania le es pequeña y comienza su delirio de expansionismo y pone su mira en Polonia, hogar de millones de judíos. Hitler entendía la palabra ario como superioridad de raza y creía que 5 generaciones eran suficientes para lavar la raza. Fue cuando colocó a judíos y gitanos en la esfera social más baja. Se promulgó la famosa frase, “Una nación, un Reich, un Führer”. Control absoluto del gobierno sobre los pueblos subyugados y se comenzó limpiando todo lo que no estuviera con Hitler. La letra J marcaba pasaportes, cédulas de identidad, comercios de judíos y todo lo que oliera a judío.
Austria, Chequia, abren campaña que unifica otros países. Surge Benito Mussolini y comienza la deportación de judíos, una disminución completa. Se acuñó otro vocablo Kristallnacht  o noche de cristales por las sinagogas destruidas.
Hay cifras horripilantes de las cantidades de judíos que se transportaron a guetos durante esta época nefasta para la humanidad. Desde el 9 al 10 de noviembre de 1938 se registraron judíos en las siguientes cantidades y los datos aquí no abarcan todas las naciones arrasadas,
Portugal, 1,000   Italia, 42,500 España, 210,000                  Polonia 3,325,000 (3,000,000 fueron exterminados)          Hungría, 825,000 (565,000 murieron)
Marruecos, 210,000       Algeria, 120,000                   Gran Bretaña, 385,000
Alemania, 525,000        Unión Soviética, 3,020,000 (995,000 murieron)
Francia, 330,000 (76,000 murieron)
Durante todo este acontecer, Hitler habló con Stalin para dividirse a Polonia. Fue cuando aparecieron los guetos. Hitler interesó a la gente a sacar buen provecho de todo este proceder y con esto logró que apoyaran al gobierno. Tomó un año para demarcar a los judíos, castigarlos y marcarlos con la estrella de David.  Al llevarlos al gueto lo aisló y además, les cerró la puerta.
Hay una reproducción de una calle de gueto (Calle Lezno) por la que transitamos y fue electrizante. El mayor de los guetos fue el de Varsovia con 14 calles y 500,000 judíos. Tenían que comprar al otro lado del muro a precios irrisorios. La palabra clave era, tiempo para sobrevivir, pero el dinero se iba acabando y morían de hambre. Los judíos que sobrevivieron estuvieron en los guetos hasta 1943. Allí se jugaba y se aprendían oficios que les permitía salir a trabajar y ganaban algún dinero. El expansionismo fue enorme y los guetos se multiplicaban.
En 1941 Hitler decidió entrar en Rusia donde había 3 millones de judíos. Ideó los asesinatos porque no podía comenzar de nuevo lo que había hecho en otros lugares; era más masivo el asunto y había que funcionar con mayor rapidez. Los echaban en enormes fosos y los ametrallaban para que cayeran muchos muertos y otros muertos vivos. Todo un horror indescriptible. Los metían en camiones para transportarlos y expedían el C2O donde iban hacinados para asfixiarlos. Muchos nazis se suicidaron durante esta masacre al tomar conciencia de lo que eran parte.
El museo ha recuperado cajas negras donde se encuentra la solución para acabar con todos los judíos. La Alemania era (es) muy detallista. Tenían que eliminar a 11 millones de judíos. El transporte a los guetos era a través de trenes. Se les avisaba que se presentaran a la estación con una sola maleta. Lo que se observa pone los pelos de punta y el corazón se achica terriblemente. Espantoso el viaje en esos trenes sin saber adónde los llevarían aunque sabían lo que les esperaba. Este transporte masivo lo mismo duraba 2 horas como 5 días. Al bajar se separaban a los hombres de las mujeres.
El médico alemán, Joseph  Mengele, experimentaba en el campo de la medicina con los judíos en campos de concentración. Los metía en una sala, los desnudaba luego los exponía a unas químicas de experimentación y muchos morían, otros quedaban deformados y otros deshabilitados completamente. Muchos eran exterminados con los que se conoce con Zyklon B, un gas de ácido cianhídrico (cianuro) en las famosas cámaras de gas. Esto hacía que no se alterara el sistema nervioso y se va muriendo lentamente. Todo era manejado por seis médicos. Así evitaban que se defecaran y se orinaran. Muertos los sacaban, los limpiaban, les quitaban el cabello que se usaba para colchones y prótesis. Luego los echaban al crematorio.
El 14 de abril de 1943 entran las tropas y los judíos disparan y los alemanes se retiran, pero luego regresan con refuerzo. Los judíos sobrevivieron hasta el 16 de mayo. Esto fue en el gueto de Varsovia.
Los judíos que quedaban les servían a los nazis para trabajar. Son los que se les tatuaban un número en la muñeca y se les cortaba el cabello. De ahí, cuando ya no era necesario su trabajo, iban al área de exterminio.
Estos pobres estaban acostumbrados a comer 80 calorías al día, cuando se les daba comida. Se la tiraban al suelo como a perros. Los más fuertes comían algo, los más débiles iban muriendo de inanición. Cuando llegaron los aliados y les dieron chocolatina veían como morían casi inmediatamente porque no estaban acostumbrados a tantas calorías. Al darles 500 calorías el organismo no podía tolerar esa cantidad. De esta forma murieron como 65,000. (fotos 44 y 45)
En el museo hay un área para una llama perpetua en memoria de los muchos que murieron. Encima de la llama hay una ventana o claraboya en el techo que simboliza la luz de la esperanza.
Pocos ayudaron a esta injusticia en el mundo. Los dinamarqueses ayudaron humanitariamente. Otros ayudaron por dinero y muy pocos sin dinero. Hubo más de 11,000 personas que ayudaron sin pedir un centavo a cambio.
La última marcha de liberación ocurrió del 6 al 8 de mayo, 1945. Los alemanes no habían terminado de exterminarlos y fueron echados en fosas comunes barridos por una pala mecánica. Algunos sobrevivieron. Cuando llegaron los ingleses le pidieron a la BBC que filmara ese horror porque algún día alguien se atrevería a negar el holocausto.
En 1937 Inglaterra, que ocupaba el territorio donde hoy está Israel, emitió una ley de no admitir judíos al territorio y deportaban a los que llegaban.
El juicio de Nuremberg, o juicios porque fue un proceso que duró desde 1945 a 1946, lo comenzaron las naciones aliadas para encausar a los que tuvieron parte en los asesinatos contra la humanidad. Entre los que se buscaban con ahínco estaba Adolf Eichmann que lo encontraron en Argentina y en Israel lo condenaron a muerte.
El Memorial sin nombre es un edificio dedicado al millón y medio de niños judíos que fueron exterminados por los nazis. Tampoco se pueden tomar fotos dentro, pero es tan impactante que marca la vida de todo visitante. El edificio está bajo piedras y no se ve. Los pinchos encima de la entrada simbolizan un edificio sin terminar porque la vida de estos niños tampoco terminó. Al entrar hay un silencio sepulcral y es una bóveda enorme, todo en negro que produce una oscuridad casi absoluta. En la bóveda brillan una miríada de estrellitas y constantemente van apareciendo las fotos de los niños y solamente se oyen sus nombres. Esta ala del museo la regaló el matrimonio de Abraham y Edita Spiegel, que perdió a su hijo, Uziel, en este infanticidio sin comentario. (fotos 46, 47,  48 y 49)
En una pared lateral está un recordatorio a Janusz Korczak, un alemán que recogió niños judíos en un tipo de orfanato para salvarlos, pero al fin fueron tomados de su casa y exterminados. Korczak les hizo creer que iban a un picnic y les dio caramelos para postre.  Existe una calle de los justos cerca de donde estaba el gueto de Varsovia por aquellos que ayudaron a los judíos.
Fuera del museo hay una columna que recuerda a los niños exterminados y enfrente de esta columna hay un tipo de tumba circular con piedras encima. Es como si fuera una foto de escuela. (foto 50)
Vivos en el recuerdo permanecerán siempre hasta que el León de Judá llegue a la tierra prometida como una lágrima suspendida en el aire. De este lugar se sale hacia Jerusalén. El estado israelí les dio ciudadanía post-mortem.
Salimos de ahí emocionados para volver a la vida real y comer en el centro de diamantes. Un lugar espectacular donde se exhiben y se pueden comprar los diamantes más afamados del mundo. El tallado de diamantes es la industria principal del país. El 60 % de los diamantes del mundo, la mayoría proviene de Suráfrica, llegan a Israel para el tallado. El 80% de la industria del diamante es propiedad de un señor apellidado Oppenheimer.
El diamante se pesa en lo que hoy se conoce como carat. Esta palabra derivó de carob, del griego καροβ y la palabra a su vez viene del algarrobo, árbol cuya vaina tiene las semillas y siempre tiene el mismo peso. Antiguamente era el método de peso.
Estamos en el Mueso de Israel y hay una enorme maqueta de Jerusalén del siglo II. El muro que presenta la maqueta lo construyó Agripa II, posterior a Jesús. Allí se observa con minuciosidad toda la ciudad con su Puerta de Damasco del segundo muro en tiempos de Jesús. También se aprecian la Fortaleza Antonia y el palacio de Herodes, además del templo. El torrente de agua que corría por una especie de cañería arrastraba los desperdicios del templo. Se ve el Estanque de Siloé cerca del lado pobre de la ciudad. Los escalones del templo eran diferentes para poder tomar conciencia del lugar. Algunos son anchos, otros estrechos, cortos. Se ve la puerta lateral del Mesías en el Valle de Cedrón y también la puerta de la mercadería por donde entraba todo lo que se necesitaba en el templo.
Los sacerdotes eran los únicos que hacían sanidad. Jesús rompió todas las reglas establecidas por la ley porque siendo D—s tenía esa autoridad.
Curó a un paralítico en sábado y mandó que cargara su lecho. Interesante comentario que si cabe aquí o no, el comentario se hizo y todo lo que ayude a entender a Jesús no está fuera de lugar.
Entramos al Santuario del Libro. Allí pudimos ver la réplica de los rollos encontrados en el Mar Muerto, pues los originales están guardados para evitar que se estropeen. Se encontraron 14,000 manuscritos. Este santuario está constantemente regado con agua para mantener la purificación. (fotos 51 y 52)
Una noche de luna que parecía sonreír al grupo que nos aventuramos a caminar a Jerusalén en la frescura donde tendríamos gratas sorpresas, entre ellas perdernos. Pero, en Jerusalén todos se hallan. Las tonterías de la juventud regresaron y parecíamos todos, un grupo de adolescentes riendo y divirtiendo el espíritu medio burlón que se apoderó de nosotros. Perderse en Jerusalén es encontrar sensaciones. (foto 53)
Esa noche dormimos muy tranquilos sabiendo que el día siguiente nos esperaban grandes aventuras.
Amanecer en Jerusalén es muy agradable y esperábamos las atracciones que nos esperaban. Era viernes, 16 de noviembre, 2012. Era nuestro último día en Israel. Las experiencias hasta entonces fueron extraordinarias, ¿qué serían las de hoy.
Era nuestro día señalado para visitar Belén. Pero, Belén está en territorio palestino y entendimos que era prudente no hacerlo por el conflicto bélico que recién había comenzado y hubo cambios en el horario. Siempre hay algo que ver y hacer en esa franja estrecha que forma un país con encantos que tocan el sentido de dependencia de D—s. En lugar comenzamos nuestro día cantando, con tonada típica judía, “///Orad por la paz de Jerusalén/// Y todo prosperado volverá. //Jerusalén, Jerusalén, Jerusalén y todo prosperado volverá.//
Emprendimos nuestro viaje, último andar por la tierra santa, y el camino que recorrimos fue hacia el sur. Queríamos aprovechar el día porque al atardecer llegaba el silencio del Sabbath. Hoy estaremos en Masada y en el Mar Muerto.
La travesía nos pasó por En-Gadi de nuevo y pasamos por el área donde Saúl entró a la cueva donde estaba David escondido.
Y cuando llegó a un redil de ovejas en el camino, donde había una cueva, Saúl entró en ella para cubrir sus pies; y David y sus hombres estaban sentados en los rincones de la cueva. […] Y se levantó David, y calladamente cortó la orilla del manto de Saúl. (1 Samuel 24:3 y 4)
Vimos un oasis. La tierra alrededor se está cayendo y está apareciendo más agua dulce. Las profecías de Ezequiel se están cumpliendo. Hay acacias en este desierto con las que se construyó el tabernáculo. Estamos en Arabá.
Y me dijo: Estas aguas salen a la región del oriente, y descenderán al Arabá, y entrarán en el mar; y entradas en el mar recibirán sanidad las aguas. (Ezequiel 47:8)
Nuestra primera parada lo fue en Qumran para ver más rollos encontrados por beduinos en el desierto donde todavía habitan. Se conocen como los rollos del Qumran. Estuvimos en un tipo de museo muy interesante donde hay una mesa larga de piedra lisa donde se ponía el papiro y se escribía de derecha a izquierda, como todavía se escribe el hebreo, y al ir terminando el texto se va enrollando el manuscrito también de derecha a izquierda y luego se guardaba en un ánfora y se tapaba. Ahí está lo que se sabe de Juan el Bautista. (foto 54)
Salimos de ahí para adentrarnos en un área arqueológica donde hay cuevas donde escribían y el agua les llegaba por medio de diques y venía de Jerusalén. (foto 55)
El agua se usaba para la purificación en piscinas acumuladoras de agua. También se encontraron cisternas para guardar el agua, tipo acueducto por canalitos.
Ya en las excavaciones de Masada se observa que el grosor de las paredes es considerable. Luego se le ponía techo a la construcción y así se evitaba la evaporación. Desde donde estamos vimos las cuevas donde es probable que se encontraran los manuscritos antes descritos.
Estamos en medio del desierto. Ahí pudimos ver la megalomanía absurda de Herodes en los años 40 a. de C. cuando vino a esta área. Su madre y su hermano estuvieron presos en esta zona. Se le ocurrió hacer una construcción monumental y grandes mejoras. Logró una fortaleza natural y cerca estaba el manantial de En-Gadi. Quiso hacer cisternas para guardar el agua e hizo almacenes para guardar comida. Todo estuvo ideado muy bien para esa época. Trajo hombres para trabajar y soldados y armas, 10,000 de ellas. Hizo construir muros alrededor e hizo el camino de la cobra con 37 torres de control. Cada una de 50 metros. Masada estaba a 400 metros de altura.
Se armaron casas para los soldados. Herodes pensaba que en caso de emergencia tendría que vivir ahí y por eso tenía que tener un palacio un poco más íntimo y acogedor. Nunca existió un enemigo, pero su megalomanía lo llevó a tener un lindo lugar de vacaciones. Total que murió a los 63 años de enfermedad venérea en el año 4 d. de C.
Llegó una época revoltosa pues hubo cambios significativos. El comandante judío, Josefo Matitía (quizá este nombre esté equivocado porque la persona de este nombre o muy similar, lo fue Flavio Josefo) se rindió en el Golán; Tito sustituye a Vespasiano y destruyó el templo. Algunos judíos se escaparon a Masada porque estaba protegida. Los romanos los esperaban abajo, pero los judíos se quedaron en lo alto y Roma al darse cuenta de la maniobra construyó una rampa para subir con carruajes de combate. Los judíos siguieron arriba muy bien. Se han encontrado un acta de divorcio y ventas de tierra lo que indica que vivieron con cierta normalidad en el lugar. Los romanos pusieron esclavos judíos porque al conocer la lengua y poder establecerse comunicación era menos posible la resistencia.
Se terminó la rampa, pero un sicario judío dio la idea de morir juntos antes de que fueran asesinados por los romanos. Se dividieron en grupos para matarse. Los romanos llegaron arriba y encontraron 960 cuerpos muertos. ¿Cómo decirlo, cómo contarlo?
Hubo un judío llamado Joseph Bar Matthew (Mattithiau) que se ofreció para escribir las historias de los romanos y cambió su nombre a Flavio Josefo, cuyas historias han dado mucha luz sobre este período de la historia judía. En Masada se encontraron a 5 niños y una mujer vivos. Lo cuenta Josefo en Guerras de los judíos. Se supone que el padre no tuvo valor para exterminar a su propia familia y solamente se quitó la vida él.
El amanecer en Masada es magnificente. Tiene el lugar un valor moral extraordinario. Los boinas rojas no juran por la patria en el Muro de los Lamentos si no en Masada. Juran o prometen que Masada no caerá de nuevo porque es israelí. Lo que hizo Herodes no sirvió para nada, pero los judíos ven en Masada que D—s existe a pesar de no tener templo.
En Masada se ve una escalera doble para el baño ritual. Había piscina y galería de estar con piso de cerámica porque era mal conductor del frío y adecuado para el sauna. Había otro sauna seco o tepidario. De ahí una escalerita iba a la sala de refrescarse.  El techo era abovedado para evitar el goteo de la condensación. De esa manera, en vez de gotear se deslizaba por los lados. Tenía además, un área para masajes. Se aprecian restos de mosaicos. En la primera sala  aun se conservan frescos. Estos estaban en el área fría. Claro, también tenía su sala caliente o caldario. Se puede ver el funcionamiento de las máquinas de aquellos tiempos; eran armados huecos por donde salía el calor. También tenía surtidores de agua exteriores para el vapor interior que se condensaba. No faltaba nada. Había millones de litros de agua que pasaban por los carriles para el agua. Pero, lo espectacular son los dos palacios o tipo de dos palacios, social y privado. En el palacio del norte había una sala de espera para pedir audiencia. La maqueta del palacio detalla todo muy minuciosamente. Había torres de contención. La vista es fantástica y las piedras son redondeadas para las catapultas del griego katapeltikon, καταπηλτικον, tipo de artillería para lanzar proyectiles. En Masada había un campamento militar. Además, había casas para los oficiales, que era la guardia personal para el cuidado de Herodes. El miedo lo hacía vivir en pánico y súper protegido. (foto 56)
También había columbarios donde se les ponía comida en los nichos a las palomas y a otras aves. (foto 57)
Durante el tiempo de los esenios, cuando los judíos estaban en Masada, las excavaciones han encontrado una sinagoga donde se hallaron Sagradas Escrituras y filacterias. La primera sinagoga en el mundo después de la destrucción del templo. Detrás de la sinagoga se halló una cisterna y un poco más atrás, una piscina de purificación.
De ahí descendimos al Mar Muerto, rica fuente de minerales entre ellos bromo, potasio y por supuesto, sal. Todo se somete a un proceso de desalinización que deja buenas entradas a Israel.
En el Mar Muerto no hay vida posible a causa de la cantidad exorbitante de sal, de ahí su nombre. Está lleno de lodo del que se dice que tiene cualidades curativas y de belleza. Una gran industria del país son los productos de belleza hechos con minerales del Mar Muerto. El turista más arrestado se embadurna de lodo y luego se mete al agua. Hay que tener mucho cuidado pues al tratar de caminar se van hundiendo los pies y una zambullida es terrible por lo salobre que afecta a los ojos. Es una experiencia, sin dudas, interesante. En la orilla, todo es lodo y luego hay unas duchas o regaderas circulares donde se puede quitar el lodo del cuerpo antes de ir a los baños a bañarse y asearse lo más posible. (foto 58)
El Mar Muerto fue nuestra última experiencia en Israel, impresionante, seductor que deja un sabor con deseos de un regreso a la tierra por donde Jesús caminó, la tierra santa.
¿Por qué siento que Israel cambió mi vida cuando ya Cristo la había cambiado hace muchos años? Nací dentro de un hogar cristiano, y por más añadidura, bautista. He sido parte de Su pueblo durante toda mi vida, he sentido Su presencia muchas, muchísimas veces, he vivido dentro del ámbito de una iglesia cristiana bautista desde mi incursión al mundo. Llegó un día en que Jesús tocó mi corazón y lo transformó y yo le di todo mi ser a Él porque para eso me llamó. Si hay alguien totalmente sorprendida en un nuevo cambio en mi vida, soy yo, sin lugar a dudas. ¿Qué tiene Israel que me tocó para nunca volver a ser la misma? No creo que, con toda honestidad, pueda contestar a la pregunta que bulle en mi cerebro sin hallar algo que remotamente se asemeje a una contestación.
Israel es un mundo real que vive y palpita a la altura del mundo, pero evidentemente, no es parte del mundo que he experimentado desde que nací. Es la tierra por donde caminó mi Salvador, por donde Cristo anduvo sanando y enseñando una nueva manera de vivir y creo que aquí es donde me empato con una posible aproximación, aunque muy vaga, del impacto de Israel en mi vida. Por eso, digo, es que tengo que decir, que viajar por la tierra santa, cambió mi forma de ver al mundo, de sentir pasión por las almas perdidas, esas que deambulan sin rumbo cierto cuando mi rumbo está ya trazado por quien murió en el Gólgota cruel, pero venció la muerte para darme entrada al trono de la gracia de Dios, por eso ahora sí puedo escribir Su nombre con todas sus letras porque Él vive en el corazón del creyente.