Mujeres Poetas y
artistas se lucen en GRANDE
Grande es la
palabra que define la magnitud y el tamaño de muchas cosas. Pero en el caso el
evento Mujeres en Grande, celebrado el pasado sábado 16 de marzo 2013 a las 4
de la tarde, en la sala Aída Bonelly del Teatro Nacional, Grande es la palabra
que resume la suma de la inteligencia, el talento, la femineidad, y la unión de
muchas voluntades en favor de una causa justa y necesaria de no violencia por
una cultura de paz. Un evento que nos llevó por un viaje magnífico en el que la
mujer fue el epicentro de los vientos, trayendo a nuestros oídos el eco de un
grito que nos hizo llorar, reír, reflexionar, cantar, y sobre todo aplaudir
desde el corazón. La apertura del evento tuvo la espectacular participación de
la cantante Adolfina Nava quien viajó directamente desde México para
interpretar el himno oficial del festival. La canción Grito de Mujer fue compuesta por la nicaragüense residente en
Miami, Zaida Pérez y está disponible para descargar a través de las páginas
del festival. Ambas mujeres
recibieron un reconocimiento de primera entrada por el apoyo en favor de la
causa. Adolfina, fue magistralmente acompañada por el ballet de jovencitas de la academia dirigida por la encantadora Xiomara Valette (desde SPM).
El Anfitrión del
evento, Eduardo Gautreau de Windt fue el mago artífice encargado de
pintarnos un mundo en donde sólo la veintena de mujeres poetas participantes
fueron las verdaderas Amazonas con su verbo-látigo, fustigando nuestros oídos
con ese grito insistente, contundente y necesario: Un Grito de Mujer! Los
colaboradores dentro de la maestría de ceremonias fueron los artistas del folklor
Geo Ripley acompañado por un segundo, Dennis
Ángeles, quienes a ritmo de tambores africanos y su maravilloso palo de
lluvia constituyeron una fuerza de empuje mayor para que retumbaran las voces
de mujer durante las tres horas exactas que duró el evento. Describimos como magistral
la colaboración de Rosa Iris Clariot, quien estuvo a cargo de introducir a las poetas
leyendo las frases identificativas de sus gritos mientras las fotos de las
participantes se paseaban en pantalla gigante, para que todas las escritoras
allí presentes se la lucieran en GRANDE. El homenaje a cargo de Rosa Iris a Jeannette
Miller con la declamación del poema “Mi Lengua” fue uno de los puntos
culminantes del emotivo acto, y si a hablar de emotividad vamos, cabe destacar la
presentación de la poeta Jael Uribe, Presidente del MPI y
creadora de concepto de Mujeres en Grande
dentro del marco de su magna creación, el Festival Internacional de Poesía Grito de
Mujer que este año rinde homenaje a la Afgana Malala Yusufzai. Jael
hizo despliegue de su voz en plena potencia con la declamación de su poema El color de mi grito, un nutrido juego
de imágenes, fuerza y energía, acompañado de una gracia impecable. Cada palabra
suya restregó en nuestros pechos ese grito, como bien lo dijo ella, fue: “…un disparo de garganta” a ritmo de un dúo de tambores irreverentes que verdaderamente espantaron todos
nuestros fantasmas. Cuan férrea es la
voluntad de esta mujer, que logró unir a poetas de distintas generaciones
atadas a una misma misión social, en favor de la mujer, por la recuperación de
la auto-estima, y la no violencia de todas las mujeres del mundo.
Dentro del
grupo de poetas participantes podemos mencionar el talento de la destacada Ángela Hernández, que dejó a más de una
de las mujeres presentes pensando con su poema Epitafio de Lucrecia Sinsky, y su poema en homenaje a las poetas Safo,
Camille y Salomé Ureña. La fenomenal
dama de la literatura Ofelia Berrido dijo
presente con sus Pájaros del Olvido. Ambas
fueron homenajeadas durante la
actividad con la estatuilla denominada “la mujer alada” símbolo MPI del valor
de una mujer que se levanta del fuego, renaciendo de sus cenizas como el Fénix,
y que se adueña del fuego con una tea, en lugar de volver a arden en él siendo
víctima. Esta hermosa estatuilla también fue otorgada a la distinguida Jeannet Miller, por ser una de las
poetas dominicanas que han trillado el difícil camino de las letras femeninas
en el país, legando a la nueva generación de escritoras un camino más diáfano y
menos arduo. Cada una expresó sus palabras de agradecimiento, mostrando eso que
las hizo merecedoras en primer lugar del reconocimiento: la humildad y el
talento.
Dentro de las
sorpresas de la noche estuvo la entrega de la estatuilla muy merecida a la
poeta revelación del MPI, Jennet Tineo,
quien emocionada no se esperaba el reconocimiento. Varias de las invitadas internacionales
también recibieron el premio por ser mujeres emprendedoras y colaboradoras
ilustres del movimiento MPI, como fue el caso de la cubana Ada Bezos Castilla quien nos emocionó con la declamación a su poema
a Hipatia en su muy singular estilo teatral. Yenilen Mola (Productora del show La Noche de Poesía Erótica de
Miami) fue vitoreada por el público asistente quienes le rogaban por uno de sus
poemas sensuales. La destacada participación de las poetas y la acertada
selección de los poemas presentados fue loable, escuchar las voces de Dulce
Ureña quien dejó sentir su grito junto a Camelia Michel, Berenice Pacheco Salazar, Xiomara García y Nelsy
Aldebot (del Colectivo Entre Lunas).
Patricia Gabas (Fotógrafa desde Málaga España) quien
con su delicioso acento español hizo justicia a nuestras hermanas musulmanas
leyendo uno de los poemas escritos por la poeta española Isabel Anaya Moreno miembro del colectivo Red Mariposa. Rosa Garde Nicolas (Enc. Sección de la Mujer) vino en representación de Amnistía
Internacional a compartir sus impresiones y agradecimientos, siendo esta
también una coordinadora exitosa del Grito de Mujer en su ciudad, y una vocera
incansable en favor de nobles causas. Mirtha Gonzales Gutiérrez (Cubana
residente en dominicana) también dijo presente junto a María Palitachi (Dom. Residente en NY) con todo y sus
pies descalzos leyendo por las víctimas de violencia. Por parte del MPI se destacaron las voces de Denisse Español (desde la
Romana) con sus poemas “aparentemente inofensivos” pero de mensaje certero
y Rossio Salvador (desde Higüey) con su poema “La otra yo”. Sin
lugar a dudas, la poeta que más emocionó a la gente fue la pequeña Darihanna Mesa Florentino (de sólo 12 años, desde San Cristóbal), miembro de la Fundación Literaria Aníbal Montaño, la
cual dejó una estela de talento tras sus
pasos con su poema Grito de Mujer.
Cada poeta fue agasajada con una planta
de flores fucsia color que identifica al festival y regalos.
Por las
entidades en favor de la Mujer se sumaron a la causa Graciela de la Cruz Bourdier (CE-Mujer)
y la expositora invitada fue Liset López
una mujer de hermosas palabras, quien en su discurso de luz, pidió además un
minuto de silencio solemne en favor de las mujeres asesinadas, los esposos
suicidas luego de haber perpetrado estos actos, y por los niños y niñas que
quedaron huérfanas a raíz de trágicos eventos involucrados con la violencia
intrafamiliar. Sin lugar a dudas, el momento más emocionante de la velada, fue
la entrega del premio a una de las miembros destacadas del Staff del MPI, Michelle de la Cruz Richardson, una de
las personas que tras bambalinas velaba por el buen desenvolvimiento del
recital cuando su nombre fue mencionado por Jael Uribe, conmoviendo hasta las lágrimas tanto a la homenajeada
como a todas las personas del público, muy en especial cuando parte de su
historia y de sus pruebas de vida surgieron de boca de la presidente, dejando
ver a todos que es posible sobrevivir a la violencia y levantarse para
convertirse en mejor persona haciendo algo productivo en favor de que no
existan más víctimas de este flagelo. Michelle ya no será nunca más una
víctima, y según dijo en su discurso de agradecimiento: “se puede, es posible, yo estoy aquí para dar fe de ello”.
La música y
la danza dijeron presentes de manos del talento indiscutible de la cantante y
productora Susana Silfa quien
musicalizó dos poemas escritos por Marivell
Contreras y Lourdes Batista), dejando
caldeados los ánimos entre todas las mujeres con su carisma y picardía. La
gracia y la destreza en la danza de vientre que nos ofreció el encanto de Linda
Zaré, aportaron el colorido
femenino perfecto a la actividad. Cabe destacar que estas dos maravillosas
artistas aportaron su talento de manera altruista en favor de la causa
haciéndose meritorias de nuestros aplausos.
Lo mejor que nos
llevamos del acto, ha sido el haber podido tener la oportunidad de conocer la increíble
labor social y cultural que realiza en el mundo el Movimiento Mujeres Poetas Internacional (MPI) en todo el mundo,
quienes aunando esfuerzos a través de la Internet han logrado
enorgullecernos y poner la bandera dominicana bien en alto en otras latitudes, en
un esfuerzo constante por llevar ese mensaje de respeto hacia las mujeres, para
que encuentren en sí mismas el valor de canalizar dolores por medio de la
poesía, reconquistar su autoestima y propiciar el encuentro de estas con las
letras como bálsamo sanador de todas las heridas. Al final, compartimos entre
amigos y poetas el cálido abrazo, las felicitaciones, un brindis y el amor por
los libros de estas talentosas mujeres de luz que nos dejaron marcada su huella
y el eco de su grito en nuestras almas retumbando en GRANDE.